Horacio Quiroga en el MACN: Cuentista, dramaturgo, poeta y … botánico
La culebra nunca pudo descubrir a la abeja y, como habían convenido previamente, no pudo comérsela. “¿Que había pasado? Una cosa muy sencilla: la plantita es cuestión era una sensitiva, muy común también en Buenos Aires, y que tiene la particularidad de que sus hojas se cierran al menor contacto. Solamente que estas aventuras pasaban en Misiones, donde la vegetación es muy rica, y por lo tanto muy grande las hojas de las sensitivas. De aquí que al contacto de la abeja, las hojas se cerraron, ocultando completamente al insecto” (La Abeja Haragana, Cuentos de la Selva; Quiroga, 1918). Horacio Quiroga (1878-1937) fue un cuentista, dramaturgo y poeta rioplatense cuyos atrapantes relatos generalmente retratan a la naturaleza sudamericana bajo sus rasgos más salvajes y muchas veces temibles para el ser humano. Sin embargo, más allá de su vida en la selva y ser uno de los maestros del cuento latinoamericano, poco se conoce de sus actividades como recolector de plantas y la formación de una colección científica depositada en el Museo Argentino de Ciencias Naturales.
El Herbario de Botánica del Museo fue fundado en 1853 constituyéndose en el primer herbario oficial de Argentina. Actualmente es reconocido internacionalmente con la sigla BA y posee unos 242000 especímenes. La principal colección del herbario es de plantas herborizadas, es decir secas y prensadas dispuestas sobre cartulinas, y protegidas y organizadas en carpetas. Estos especímenes brindan información de la biodiversidad pasada de nuestro país y el mundo desde mitad del siglo XIX. Además, en el herbario se conservan plantas como colecciones especiales debido a provenir de expediciones científicas históricas o haber sido realizadas por personajes destacados en Argentina. Este último caso es el de la colección de plantas de Horacio Quiroga.
Como parte del proyecto institucional del Museo, las técnicas profesionales Lic. Mónica Stampacchio y Lic. Celeste Alvarenga bajo la dirección del Dr. Diego G. Gutiérrez se encuentran actualmente a cargo de la informatización de las colecciones de plantas y la digitalización de los especímenes en imágenes de alta resolución.
La colección de plantas vasculares realizadas por Quiroga y depositadas en el herbario BA esta conformada por 626 especímenes. Dichas plantas fueron recolectadas entre los años 1913 y 1914 en la localidad argentina de San Ignacio, provincia de Misiones. De la totalidad de estos especímenes 35 (5,6%) corresponden a helechos y 591 a plantas con flores. A su vez, entre estas últimas, la mayoría (425, 67,9%) son Dicotiledóneas y menos de la mitad (166, 26,5%) Monocotiledóneas. Se destacan principalmente las familias botánicas Poacea (109) y Asteraceae (101), y en menor medida Fabaceae (37), Euphorbiaceae (25), Solanaceae (24) y Rubiaceae (20). Muchos de los especímenes presentan etiquetas de campo escritas por Quiroga y en algunas de ellas el escritor ha dejado su impronta.
En 1908, Quiroga vivirá en la selva misionera, en San Ignacio, donde llevará a cabo diversas actividades como plantaciones, caza, cría de animales y la recolección de plantas en los alrededores del pueblo. Años después publicará “Cuentos de la selva”, seguramente influenciado por la grandiosidad de la vegetación de la selva cuyos registros de plantas desde hace más de 100 años se resguardan en el Museo para conocer, estudiar y conservar la biodiversidad de nuestro país.